Quiero compartir un maravilloso
movimiento literario que he conocido gracias a la intensa labor que realiza Silvia
Favaretto, escritora, editora y promotora cultural italiana, a quien
recientemente tuve la dicha de conocer a través del bendito Internet. Entre
diversos proyectos, Silvia coordina la publicación virtual Rivista di Poesía7Lune, promueve y traduce al italiano la obra de poetas latinoamericanos
contemporáneos y es parte activa de una lucha fervorosa de la mujeres contra la
sumisión y el maltrato a través de la palabra poética.
En Afganistán la palabra
insumisa ha encontrado su cauce en el “landay” (en lengua pashtu: pequeña
serpiente venenosa), un poema de dos versos que hacen un total de 22 sílabas.
Esta singular forma poética tiene su origen en la tradición oral afgana y a
menudo ha sido divulgada de manera anónima. En la antigüedad la temática
abarcaba la guerra, el amor, la separación y el dolor; actualmente el landay ha
sido tomado como estandarte de rebelión de las mujeres pashtu –alrededor de 21
millones de mujeres que viven en la frontera entre Afganistán y Pakistán–, que
usualmente no leen ni escriben pero han encontrado en esta forma oral la
oportunidad de liberar sus pensamientos del yugo ejercido por los varones de su
comunidad.
La pasión, el deseo, la
venganza, el arrojo… sentimientos densos se aprietan en dos líneas. Arriesgando
la vida –y, precisamente, por amor a la vida–, en un contexto donde no sólo
tienen prohibido escribir poemas, sino aprender a leer, muchas mujeres afganas
usan el landay para fortalecerse entre ellas y denunciar ante el mundo los
abusos a los que son sometidas. Si sus esposos o hermanos se dan cuenta son
severamente castigadas, como fue el caso de la poeta mártir Nadia Anjuman,
asesinada a golpes por su marido en 2005. Ha sido tal la fuerza de estos poemas
que, de a poco, han rebasado fronteras y cada vez son más las mujeres que se
solidarizan divulgando e incluso escribiendo landays.
A través de su revista literaria, Silvia Favaretto ha convocado a las mujeres poetas hispanoamericanas que gusten
unir su voz a esta causa.
Aquí un Landay afgano:
En mi sueño, era la presidenta.
Cuando desperté, era la
mendiga del mundo
Y de Hispanoamérica, Lourdes
Soto expresa:
“¡No eres poeta!”, dice Él
mientras busca entender la
palabra mujer
Clic para leer el artículo escrito por Silvia Favaretto, del que tomé esta información.
GRACIAS Marisol: MAR y SOL POR TAN ILUSTRADORAS PALABRAS...
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